La Haya ha decidido prohibir la publicidad relacionada con los combustibles fósiles.

La prohibición votada por el ayuntamiento afectará a la publicidad de carburantes, coches, cruceros y viajes aéreos en vallas publicitarias y paradas de autobús.

La Haya se convertirá en la primera ciudad del mundo en introducir una legislación local para prohibir la publicidad relacionada con combustibles fósiles.La moción votada en el ayuntamiento a finales de la semana pasada a propuesta del Partido por los Animales (PvdD), representa un ejemplo único y de gran importancia ya que regula toda la publicidad y los espacios destinados a ella en la ciudad con un único acto.“Una señal importante”, afirmó Leonie Gerritsen, concejal del PvdD, y un paso adelante para los planes de la ciudad que domina el Mar del Norte, principal centro administrativo de los Países Bajos y corazón de la justicia internacional.De hecho, La Haya pretende anticipar objetivos de reducción de los Países Bajos, con el objetivo de convertirse en carbono neutral para 2030, 20 años antes del objetivo nacional de 2050.

¿Qué contiene la moción que prohíbe la publicidad “fósil”?

La moción afectará a todos los espacios públicos, como vallas publicitarias, mamparas publicitarias y paradas de autobús.Los anuncios prohibidos no sólo serán los relacionados con las compañías petroleras que producen, por ejemplo, gasolina y diésel, sino también con los fabricantes de automóviles, las compañías aéreas y los viajes en crucero.La legislación debería entrará en vigor el 1 de enero de 2025:esto significa que la ciudad tiene cuatro meses para "limpiar" sus espacios de publicidad.La innovación más importante introducida por la iniciativa PvdD se refiere al contexto legislativo.Hasta ahora, muchas ciudades han intentado contener la publicidad en cuestión mediante contratos individuales o acuerdos voluntarios.Un sistema que resultó útil pero igualmente lento y engorroso.Por lo tanto, hasta ahora faltaba una medida capaz de sistematizar la prohibición y extenderla a escala local.

La Haya no es la única

Otros dos municipios holandeses, Zwolle y Tilburg, ya han anunciado que seguirán el ejemplo de La Haya, imponiendo prohibiciones mediante legislación local.Sin embargo, La Haya no es la primera ciudad que toma medidas enérgicas contra la publicidad "sucia".En los últimos años ciudades como Edimburgo y Ámsterdam han intentado armonizar las regulaciones de publicidad de la ciudad con las políticas ambientales.La capital escocesa el prohibio promover productos con alto contenido de carbono en vallas publicitarias y paradas de autobús.En aquella ocasión, bienes como los coches deportivos y las vacaciones en cruceros fueron calificados de "incompatibles con los objetivos de neutralidad climática".En Australia, sin embargo, algunos municipios, incluida la ciudad de Sydney, han votado a favor de una serie de restricciones a la publicidad y el patrocinio de combustibles fósiles.