- |
NÁPOLES – Muchos aplausos y cánticos de incitación de los ciudadanos napolitanos a los agricultores, muchos de ellos jóvenes, que salieron hoy a las calles a bordo de sus tractores. Un centenar de vehículos, procedentes de distintos puntos de la provincia de Nápoles, que recorrió las calles del centro, llegando también al paseo marítimo napolitano.En los tractores ondea la bandera tricolor y hay carteles con diversos lemas, como "Manos fuera de nuestra tierra", "Queremos vivir de la agricultura" y "Nos estáis privando de nuestro futuro".Muchos curiosos y turistas toman fotografías y filman la procesión.
En una carta que pretenden enviar al gobierno a través del prefecto, los "campesinos libres de la provincia de Nápoles" destacan sus principales preocupaciones: "la volatilidad de los precios de los productos, el aumento de los costes de producción, el impacto de los cambios climáticos, las limitadas acceso a los mercados, competencia internacional basada en estándares más bajos”-, añadiendo algunas propuestas de intervención.
Paolo Petrella, un agricultor de Acerra, da la alarma:“Muchos de nosotros producimos patatas.Pagas 1,50 euros por una bolsa de patatas fritas de 100 gramos, ganamos 15 centavos por kilogramo. No podemos hacerlo más".
LEA TAMBIÉN: La promesa de los agricultores:“Veinte mil en el Circo Máximo el jueves con tractores”
“El principal problema – subraya – reside en la Competencia desleal procedente de productos no pertenecientes a la UE., que no siguen los protocolos europeos ni siquiera los de Italia, porque somos el país con mayor control sobre los productos fitosanitarios.Producimos alimentos saludables para todos los italianos y queremos seguir haciéndolo, pero pidiendo que nos escuchen.Hay dificultades objetivas que impiden una remuneración adecuada para quienes producimos la materia prima."
“Sólo cuenta la provincia de Nápoles hoy 10 mil empresas agrícolas.90% de cierre de riesgo y son empresas que producen productos excelentes – explica Vito Lombardi -.Hay muchas marcas de la provincia de Nápoles y de Campania, envidiadas en el mundo interno, pero las políticas europeas de los últimos años nos han obligado a cerrar porque los costes de producción son superiores a los ingresos".Para Filippo Di Marco, también de Acerra, “siempre hay que apoyar el Made in Italy. El gobierno debe abrir una mesa de negociación porque también debe escuchar a los agricultores de la provincia de Nápoles, que son muchos.La que está presente hoy en Nápoles es sólo una representación de 100 tractores, pero obviamente hay muchas empresas, y las que han cerrado ya son muchas. No estamos aquí pidiendo ingresos ni subsidios. Estamos aquí porque queremos trabajar".