- |
ROMA - Entre agua y comida, ahora ingerimos el equivalente plástico de una tarjeta de crédito cada semana. Los micro y nanoplásticos son parte de nosotros, literalmente:Varios datos de la literatura demuestran la presencia de micro y nanopartículas de plástico a lo largo de toda la cadena alimentaria.Se han encontrado fragmentos en pescado, carne, frutas y verduras (las manzanas y zanahorias son las más contaminadas), miel, azúcar, sal y cerveza.
“Se estima que podemos ingerir de 0,1 a 5 gramos de trozos de plástico invisibles a la semana, casi lo mismo que una tarjeta de crédito“.El médico lo declaró a la Agencia Dire Daniela Gaglio, director científico de la Infraestructura de Metabolómica del Instituto de Bioimagen y Fisiología Molecular (IBFM), del Consejo Nacional de Investigaciones (CNR).El equipo de investigadores, dirigido por el profesor Danilo Porro y coordinado por Daniela Gaglio, demostró experimentalmente que las células sometidas a exposición aguda y crónica a partículas de poliestireno muestran una alteración del metabolismo y un aumento del estrés oxidativo (Bonanomi et al., 2022).Por ello, con su investigación, el CNR ha puesto de relieve el efecto potencial que estas micro y nanopartículas pueden tener sobre la salud.
PLÁSTICO CARCINÓGENO
“El estudio muestra – continúa el experto – que Las micropartículas y nanopartículas de poliestireno absorbidas por las células del colon humano inducen cambios en el metabolismo similares a los inducidos por el agente tóxico azoximetano.:esta última es una molécula cancerígena y neurotóxica que ha sido muy estudiada precisamente por su capacidad para inducir cáncer de colon.Lo que se desprende del estudio realizado con enfoques innovadores de la metabolómica (la ciencia que estudia en detalle el metabolismo y los procesos metabólicos) es que las células sanas del colon humano, sometidas a una exposición tanto aguda como crónica a partículas de poliestireno, muestran una alteración del metabolismo y un aumento de la oxidación. estrés.Finalmente, el estudio destacó que La exposición al plástico induce alteraciones metabólicas que normalmente se encuentran en formaciones cancerosas., lo que indica una posible acción de los micro y nanoplásticos como factor de riesgo de cáncer de colon.Hasta la fecha, este es uno de los pocos estudios que proporciona información sobre cuál podría ser el efecto del plástico en nuestro cuerpo".
EL PLÁSTICO ESTÁ EN EL 93% DE LAS BOTELLAS DE AGUA
Otros estudios recientes realizados con agua del grifo, embotellada y de manantial han demostrado que las micropartículas están presentes en todas las fuentes de agua analizadas (Cox et al., 2019).El análisis del agua del grifo de 159 fuentes diferentes mostró que el 81% de las muestras contenía micropartículas de menos de 5 mm (Kosuth et al., 2018).Otros estudios realizados En 259 botellas de agua de 11 marcas diferentes y 27 lotes diferentes se demostró que el 93% de las muestras contenían micropartículas de plástico. (Mason et al., 2018).Otro estudio encontró altos niveles de microplásticos en agua mineral embotellada en 22 materiales plásticos multiusos diferentes (en comparación con envases de plástico o cartón de un solo uso), así como en botellas de vidrio (Schymanski et al., 2018).
“Esto confirma - concluye Daniela Gaglio - lo interesante que es para la comunidad científica el estudio de Qian et al., publicado en la revista PNAS, teniendo en cuenta también que se han encontrado partículas de micro y nanoplástico en varios órganos:colon, pulmón, corazón y placenta.Como afirman correctamente los autores, se sabe muy poco sobre el efecto que estas partículas tienen en nuestro organismo".